P ara estimular la economía de las ideas y capitalizar a la industria creativa es fundamental crear espacios urbanos que combinen el estilo de vida y los cambios demográficos de las industrias de alta tecnología con cautivantes centros de oferta cultural para mejorar así, las condiciones para participar como país en la competencia mundial.
Las universidades e instituciones enfocadas a la investigación son un baluarte en la economía creativa, pues constituyen una gran fuente de ventajas competitivas al fungir como palanca para proyectos experimentales de la iniciativa privada, proveyendo a la industria en general de tecnología, talento y tolerancia.
Para generar un clima de negocios sólido, es necesario fomentar y promover una estrategia general dedicada a atraer y retener gente, especialmente a las personas creativas, que por su perfil, estarán siempre buscando ideas que detonen su potencial e intelectualidad.